La vacuna BioNTech, Pfizer, puede inducir la aparición del síndrome de Evans asociado a lupus eritematoso sistémico, así lo reportó un artículo (1) publicado recientemente por International Journal of Hematology. Esto indica que esta vacuna puede causar trastornos autoinmunes, además de las alteraciones hematológicas que ya se han informado. Por ende, es importante que, para estos pacientes se recomiende una estrecha vigilancia de 1 a 4 días después de cada dosis. La pandemia de la COVID-19 ha provocado inestabilidad de los sistemas médicos y sociales en todo el mundo. Se espera que las vacunas eviten una mayor propagación y agravamiento de la enfermedad. La vacuna de BioNTech, Pfizer ha demostrado una eficacia del 95% en la prevención de la infección sintomática del SARS-CoV-2. Sin embargo, estudios recientes reportaron que está asociada con la aparición y progresión de trastornos hematológicos autoinmunes, especialmente trombocitopenia inmunitaria.  El síndrome de Evans se caracteriza por la coexistencia de anemia hemolítica autoinmune (AIHA) y trombocitopenia inmune (ITP). Es una condición poco común y se ha demostrado que está asociado con trastornos autoinmunitarios, neoplasias hematológicas, infecciones y embarazo.  Sin embargo, en un artículo (1) reciente y publicado por International Journal of Hematology se reportó un caso de síndrome de Evans de nueva aparición con lupus eritematoso sistémico (LES) después de la aplicación de la vacuna Pfizer en una mujer de 53 años.  La paciente había recibido dos dosis de la vacuna. Una vez colocada la primera, la púrpura en las extremidades y el agravamiento de las sibilancias habían aparecido de forma transitoria durante unos días. Posterior a la segunda dosis, un control de rutina mostró trombocitopenia con anemia leve. Para este caso, los hallazgos inmunológicos que incluyeron hipocomplementemia y la presencia de anticoagulante lúpico indicaron una fuerte asociación con LES. Además, se evidenció antecedentes de asma bronquial, enfermedad de Vogt-Koyanagi-Haranda y enfermedad de Hashimoto, todas consideradas como enfermedades autoinmunes. Ya se ha informado de LES de nueva aparición posterior a esta vacuna, así como de algunos casos de aparición o progresión del síndrome de Evans en pacientes con COVID-19. Aunque el mecanismo exacto subyacente no está claro en la actualidad, la vacunación de los pacientes con este síndrome debe considerarse positivamente para la prevención de COVID-19. Este hallazgo sugiere que la vacuna de ARNm de Pfizer puede causar un trastorno autoinmune, por lo que, para los pacientes con enfermedades hematológicas se recomienda una estrecha vigilancia de 1 a 4 días después de cada dosis. Los médicos deben determinar cuidadosamente la indicación de vacunación e informar a los pacientes con alteraciones hematológicas autoinmunes sobre la posibilidad de progresión de la enfermedad. Se requieren más estudios para aclarar el mecanismo de la reacción inmune y mejorar la seguridad de esta vacuna.  Comentario editorial. Aunque la vacuna de Pfizer ha demostrado un 95% de eficacia, se continúan reportando eventos adversos como los trastornos hematológicos y en este caso un trastorno inmunitario que es el síndrome de Evans. Sin duda, existe la necesidad de estudios más amplios que permitan determinar la respuesta inmunitaria y progresar en la seguridad de esta vacuna.  También le puede interesar: <a href="https://www.docred.com/articulos/articulo-medico-efectos-adversos-posteriores-vacuna-COVID-19" target="_self">Eventos adversos posteriores a la vacunación de COVID-19</a>

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Síndrome de Evans asociado con lupus posterior a la vacunación COVID-19 

La vacuna de Pfizer podría causar síndrome de Evans asociado a lupus eritematoso sistémico, además de otros trastornos hematológicos autoinmunes. Lea más acá.