La obesidad es una enfermedad crónica y un reto para la salud pública mundial ya que puede asociarse a resistencia a la insulina, hipertensión y dislipidemia, así como a diabetes tipo 2, enfermedad cardiovascular y enfermedad grasa hepática no alcohólica. Actualmente se ha demostrado que la obesidad además disminuye la expectativa de vida y es uno de los factores de riesgo más relevantes para requerir hospitalización y necesidad de ventilación en personas con COVID-19.El tratamiento médico fundamental de la obesidad es la modificación del estilo de vida con dieta y ejercicio, sin embargo sostener la reducción de peso a largo plazo es difícil para una gran cantidad de pacientes. Las guías de práctica clínica recomiendan tratamiento médico principalmente en individuos con índice de masa corporal (IMC) &gt; 30 Kg/cm2 o en IMC &gt; 27  en pacientes con comorbilidades; sin embargo  el médico se enfrenta al limitado número de fármacos, a su modesta eficacia y aspectos como seguridad y costo.Semaglutida es un análogo del péptido 1 similar a glucagón (GLP-1) que cuenta con aprobación, en dosis de 1 mg administrado por vía subcutánea, una vez a la semana para el tratamiento médico de los adultos con diabetes tipo 2 (DM2). Como beneficio adicional semaglutida disminuye el riesgo de eventos cardiovasculares en personas con DM2 y enfermedad cardiovascular.En un experimento de fase 2, el fármaco en referencia indujo pérdida de peso en adultos con DM2 y obesidad y ahora es motivo de un estudio clínico global fase 3 (STEP o Semaglutide Treatment effect in people with obesity) para evaluar eficacia y seguridad.Estudio STEPEl estudio aleatorizado, a doble ciego y controlado con placebo STEP incluyó 1961 adultos sin DM2 con un IMC &gt; 30 kg/cm2 o &gt; 27 kg/cm2 con comorbilidades quienes fueron asignados de manera aleatoria en proporción 2 a 1 a 68 semanas de tratamiento con semaglutida (n=1306) una vez a la semana por vía subcutánea (2.4 mg) o a placebo más estilo de vida (n=655).Los criterios de valoración primaria fueron en conjunto el porcentaje de cambio en el peso corporal desde el inicio del estudio y la reducción del peso de al menos 5%.Las características demográficas entre los grupos fueron similares, el 74.1% de los participantes eran mujeres con edad media de 46 años. El peso corporal medio fue de 105,3 kg, el IMC medio de 37,9 kg/cm2 y el perímetro de cintura medio de 114,7 cm. El 43,7% de los sujetos tenía prediabetes. En el momento del cribado, la mayoría de los participantes (75,0%) tenían al menos una afección coexistenteEl promedio de cambio de peso desde el inicio a la semana 68 fue una disminución de -14.9% en el grupo semaglutida en comparación con una disminución de -2.4% en el grupo placebo.Más participantes en el grupo semaglutida que en el grupo placebo, alcanzaron pérdidas de peso mayores (entre 5% y 15%).Además la semaglutida se asoció con mayor reducción de la circunferencia de cintura (–13.54 cm frente a -4.13 cm con placebo; IC 95%, –10.30 a –8.53), IMC (–5.54 contra –0.92 con placebo) y presión arterial sistólica y diastólica. La escala de funcionamiento físico SF-36 también mejoró de forma significativa con semaglutida. Los efectos adversos más comunes con semaglutida fueron náuseas y diarrea transitorios con severidad de leve a moderada. Sin embargo, por los efectos adversos gastrointestinales más participantes del grupo semaglutida que del grupo placebo descontinuaron el tratamiento (4.5% vs 0.8%).ConclusiónLos autores concluyeron que en participantes con sobrepeso u obesidad semaglutida 2.4 mg una vez a la semana más intervención en el estilo de vida se asocia a reducción clínicamente relevante del peso corporal.Comentario editorialEl presente estudio clínico publicado en febrero de 2021 en New England Journal of Medicine muestra la importancia del tratamiento del sobrepeso/obesidad y los beneficios logrados con semaglutida en cuanto a la reducción de peso y otros índices cardiometabólicos pronósticos de enfermedad cardiovascular y de diabetes. Una consideración que los profesionales de la salud deben tener en cuenta es el posible alto costo del medicamento e insistir en la modificación del estilo de vida como base de la terapia para perder peso. <figure class="image"><img src="https://res.cloudinary.com/docred/image/upload/t_optimization/v1615293797/DOCRED_Plataforma_Graficos3_05_e6aed45b5c.webp" /><figcaption>Figura 1: Cambios en el peso semanales con semaglutida o placebo Eje Y: Cambios desde el inicio (%) Eje X: Semanas desde la aleatorización Placebo Semaglutida Adaptado de 1.</figcaption></figure> También le podría interesar: <a href="https://www.docred.com/noticias/ne-metformina-reduce-puede-aumentar-riesgo-cardiovascular-pacientes-diabetes" target="_self">Metformina no reduce, y puede aumentar, riesgo cardiovascular en pacientes con diabetes</a>

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Semaglutida, un hipoglicemiante para el tratamiento médico de la obesidad

El estudio clínico STEP muestra efectividad de la semaglutida para reducir peso en pacientes sin diabetes pero con sobrepeso u obesidad.