La esofagitis aguda puede simular otras condiciones clínicas, algunas de ellas potencialmente graves como el síndrome coronario agudo o la perforación de víscera hueca. La etiología de la esofagitis es parte del constructo a tener en cuenta en el abordaje del paciente con este diagnóstico, y una de las causas que siempre se debe considerar es la inducida por medicamentos. Se presenta el caso de un hombre joven con esofagitis aguda severa por bifosfonato. <figure class="poll" data-id="246">{ Poll ID: 246}</figure>Presentación del caso:Hombre de 30 años con 4 días de evolución de epigastralgia de intensidad 7/10, con irradiación dorsal y disfagia progresiva para sólidos. El paciente negaba cuadros clínicos similares previamente u otros síntomas gastrointestinales relacionados como vómito, alteración del tránsito intestinal, hemorragia digestiva o pérdida de peso. Dentro de los antecedentes médicos se encontró la prescripción de cápsulas recubiertas de alendronato, 70 mg cada mes luego de fractura vertebral hace dos años con diagnóstico de osteoporosis de etiología no clara. No se reportaron otros antecedentes personales o familiares.Dos días antes del inicio de los síntomas abdominales el paciente tomó 1 de las cápsulas de alendronato con agua y se acostó inmediatamente luego de tomarla. En el examen físico de ingreso, el paciente tenía signos vitales normales con defensa abdominal epigástrica sin irritación peritoneal y sin otros hallazgos clínicos significativos. Los paraclínicos mostraron leucocitosis de 19.000/ml y elevación franca de la proteína C reactiva (PCR). Las radiografías toracoabdominales no mostraban compromiso mediastinal ni signos sugestivos de perforación intestinal, tanto el electrocardiograma como los marcadores séricos de lesión miocárdica fueron negativos. Debido a la persistencia de síntomas se realizó endoscopia digestiva superior donde se evidenció ulceración circunferencial con descamación y friabilidad de casi toda la mucosa esofágica, excepto una pequeña porción de esófago distal. Adicionalmente, se encontró ulcera longitudinal de mayor profundidad en el tercio medio del órgano. Se inició tratamiento parenteral con inhibidor de bomba de protones 2 veces al día y sucralfato oral 4 veces por día, debido a la prolongada intolerancia a la vía oral fue necesario iniciar soporte nutricional parenteral. Se descartaron causas infecciosas como virus herpes simple, citomegalovirus, virus de Epstein-Barr, varicela zoster, virus de inmunodeficiencia humana y tuberculosis. El análisis histológico reveló ulceración mucosa extensa con detritus fibrinopurulentos sin evidencia de microorganismos o células neoplásicas. El paciente fue dado de alta 15 días después de su ingreso, sin complicaciones y con tolerancia a la vía oral. Fue remitido al seguimiento especializado de su enfermedad y continuó con administración de alendronato intravenoso. Luego de 3 meses, se realizó la endoscopia de seguimiento donde se encontró resolución completa de las lesiones. En este caso y luego de descartar otras causas, se consideró que las lesiones esofágicas estaban directamente relacionadas con la manera inadecuada de consumir la cápsula de alendronato, pues se hizo con mínima cantidad de agua y posteriormente se adoptó la posición supina de forma casi inmediata. Discusión:Los medicamentos son causa infrecuente de esofagitis y disfagia en pacientes jóvenes. Entre los fármacos principalmente asociados a esofagitis se encuentran algunos antibióticos, antiinflamatorios no esteroideos (AINES) y bifosfonatos. El alendronato es un bifosfonato de primera línea para el tratamiento de la osteoporosis. Su biodisponibilidad oral en ayunas es pobre (&lt;1%), es frecuente que sea causa de síntomas gastrointestinales y pobre adherencia del paciente al tratamiento. En contraste, la formulación intravenosa requiere administración menos frecuente y no se asocia con síntomas gastrointestinales. La forma mediante la cual el alendronato puede provocar la lesión de la mucosa se asocia con lesión química directa cuando la tableta pasa a través del esófago o por reflujo gástrico que contiene alguna proporción del medicamento. El alendronato reemplaza los fosfolípidos resistentes al ácido por unión competitiva a la fosfatidilcolina, que debilita así la defensa de la mucosa y lleva a erosión y ulceración del tejido. Los eventos adversos esofágicos son reportados en cerca de 0.04% de pacientes en tratamiento con alendronato y la ulceración severa es aún más rara. Los síntomas y la severidad del cuadro incrementan con la edad y con la existencia de enfermedad por reflujo gastroesofágico, así como en pacientes que consumen agentes antitrombóticos o AINES. Al paciente que requiera tratamiento con bifosfonatos se le debe recomendar consumir el medicamento con al menos 180 a 240 ml de agua, sin masticar ni triturar la tableta, evitar la posición decúbito durante al menos 30 a 60 minutos después. La tableta también debe tomarse al menos 30 minutos antes del desayuno. También le puede interesar: <a href="https://www.docred.com/noticias/noticia-medica-alendronato-reduce-el-riesgo-de-diabetes-tipo-2" target="_self">Alendronato reduce el riesgo de diabetes tipo 2</a>

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Esofagitis Severa Inducida por Medicamento

Caso clínico de paciente joven con esofagitis severa inducida por alendronato
